#21 - Lactancia materna: vínculo, oxitocina y salud mental
En el episodio 21 hablamos con la Dra. Carmela Baeza sobre temas actuales en lactancia materna y salud mental.
Carmela es médico, especialista en medicina familiar y comunitaria. Obtuvo el título de IBCLC (experta en lactancia materna) en el año 2005. Es sexóloga y monitora de método sintotérmico.
Está a cargo del área de lactancia del Centro Raíces, donde atiende a madres y bebés en la consulta de medicina de la lactancia y coordina y forma parte del equipo docente. Es autora de artículos científicos así como de divulgación, y también del libro de lactancia y crianza “Amar con los Brazos Abiertos”.
Como siempre, puedes escuchar (y ver) el episodio en Spotify, Apple Podcast o Youtube.
Temas clave
- Lactancia materna como recurso en el acompañamiento de problemas de salud mental.
- Lactancia nocturna y su relacion con el descanso materno.
- Hipogalactia y mastitis: estrategias actualizadas para su manejo.
- Lo que dice (y no dice) la evidencia sobre probioticos y disbiosis en la lactancia.
- La lactancia como herramienta para el apego, no como un fin en si misma.
Enlaces
Transcripción del episodio
Carmela K Baeza (00:00)
yo creo que el papel principal de la matrona, tanto en embarazo como en el parto, como el posparto, lactancia, se resume muy facilmente y es proteger la oxitocina. Todas las cosas que aumenten la oxitocina en la madre y el bebé van a ser un bien, corto, a medio y a largo plazo.
El embarazo, el apoyo, el acompañamiento, el que las madres se conozcan entre ellas, que se puedan acompañar, escuchar, preguntarle por salud emocional, crear esos espacios.
Judith Janssen (00:44)
En este episodio hablamos con la doctora Carmela
es médico especialista en medicina familiar y comunitaria y obtuvo el título de IBCLC, el experto en lactancia materna en el año 2005.
Además es sexóloga y monitora de método
del área de lactancia del Centro Raíces donde atiende a madres y bebés en la consulta de medicina de lactancia
coordina y forma parte del equipo autora de artículos científicos, así como de divulgación
crianza Amar con los brazos abiertos.
Hoy hablamos con ella sobre, por supuesto, lactancia, pero también la relación de lactancia y salud mental, hablamos también de actualizaciones en el manejo
la
Judith Janssen (01:29)
Muchísimas gracias por estar aquí con nosotras hoy en este episodio y bueno solemos preguntar a nuestras invitadas cómo empezó tu camino en el mundo perinatal, en particular en tu caso la lactancia. ¿Cómo empezó ese camino?
Carmela K Baeza (01:43)
Pues
Mira, en mi caso fue... yo creo que muy parecido a muchas mujeres que trabajamos en este campo, ¿no? A raíz de una dificultad que te ocurre en tu propia familia con tu propio bebé y a raíz de ahí te das cuenta de... Bueno, pues en mi caso de que como médico no tenía ni idea de lactancia y que era una cosa que era importante, ¿no? A mí me ocurrió en el embarazo de mi primer bebé, a las 20 semanas de gestación nos diagnosticaron una hipoplasia de ventrículo izquierdo.
Que es una enfermedad, una malformación cardíaca bastante importante. Y esto fue hace 24 años, con lo cual en esa época tampoco era fácil la cirugía para los niños aquí en España. Tirando de muchos amigos y de mucho apoyo familiar, nos fuimos a Estados Unidos porque ahí le podían operar nada más nacer. Y cuando nació Javier, claro, estaba en la UVI y el mensaje que yo recibí fue...
lo más importante que puedes hacer por tu hueé es sacarte leche y darnosla porque la necesita. Entonces, claro, os imagináis, yo me puse ahí a tope con el sacaleches cada hora y media como una campeona. Y realmente entonces Javier estaba siempre con Carlos, con mi marido, era quien le hacía los cuidados, porque ahí en la UVI había, pues podían estar los padres 24 horas, era una gozada, y yo estaba pues pegada al sacaleches. Entonces a los 25 días Javier se murió. Había estado fenomenal, tuvo una parada cardiaca y se murió.
Y yo me planteé, pensé, es que si hubiera podido elegir entre estar con él y que tomase fórmula, o sacarme leche y no estar con él, habría estado con
digo, qué injusto tener que elegir entre que tome mi leche o estar con mi bebé. Y qué rabia no haber sabido cómo ayudar a la que se agarrase a llevar una lactancia materna adelante. Y a ese cuando empecé, pensé que no me gustaría que a ninguna madre con la que yo trabajo le pase esto. Ojalá no tuviese que pasar.
Y me acuerdo la sorpresa que sentí como médico al encontrar que había un libro entero sobre lactancia materna. Yo pensaba, ¿en un libro? ¿De qué hablan? ¿Hay un libro entero realmente sobre lactancia? Y claro que sí, es una ciencia grande y maravillosa.
Judith Janssen (03:32)
Wow, vaya historia. Lo siento mucho y a la vez, sí, lo que tú dices, muchas veces esas experiencias son los que nos marcan y nos dirigen el camino, Así que, me alegro esto te ha llevado aquí, que eres un gran referente y hace muchos años que estás ahí,
Alejandra Oliden (03:39)
Mm-hmm.
Judith Janssen (03:48)
promocionando todo este campo, así que, bueno, y...
Carmela K Baeza (03:51)
Muchas gracias.
Judith Janssen (03:51)
Y
últimamente he visto que estás también bastante hablando de temas de salud mental en relación con la lactancia materna, ¿no? Cada vez también tiene más atención la salud mental, entonces me imagino que, bueno, que cada vez también se sabe más desde la evidencia. Y más allá
Carmela K Baeza (03:59)
Mm-hmm.
Judith Janssen (04:06)
beneficios físicos de la lactancia materna, ¿qué impacto tiene la lactancia en la salud mental materna?
Carmela K Baeza (04:12)
La verdad es es un campo muy interesante porque tiene muchísimo impacto. Cada día vamos descubriendo más beneficios que tiene la lactancia para las madres. Siempre nos hemos centrado mucho en lo bueno que es para los bebés, pero parece que es solo bueno para los bebés. Sin embargo, para las madres, tanto en lo físico como en lo emocional, realmente es un recurso maravilloso. Por ejemplo, en el tema de la depresión postparto, sabemos que una buena lactancia aumenta los niveles de oxitocina
muchísimo y esto protege frente a la depresión postparto, frente a la ansiedad, frente a estas dificultades que no es fácil muchas veces el puerperio ni ajustarse a ser madre y las exigencias que hay. La lactancia está diseñada para ayudar a las madres no sólo a entender a sus bebés, que es importantísimo, sino a disfrutar de esa maternidad, a estar a gusto, a dormir mejor, a no tener que pensar qué le pasa a mi bebé, sino simplemente estoy con mi bebé,
y mi cuerpo entiende lo que necesita mi bebé y esto es a través de este contacto físico y me hace sentir bien, me hace sentir capaz, y en ese sentido me protege frente a las dificultades de salud mental.
La depresión postparto en las mujeres adapta mucho la forma de ansiedad postparto, van muy unidos, es una forma de manifestación, por ejemplo, una mujer está con depresión postparto, a veces tiene un componente de tristeza, pero a veces lo que tiene es como una preocupación constante por su bebé, que no está bien, que no está bien el peso, que no están bien las caquitas, que no está comiendo bien, es como una ansiedad constante sobre la salud del bebé y también sobre su propia capacidad, más que una tristeza, o que tenemos como esa...
esa forma dual en la que se puede manifestar esta afectación.
siempre dice la gran Ibone Olza que es la herramienta del vínculo. Es decir, no es que tengas que dar el pecho para vincularte con tu bebé, porque te puedes vincular con tu bebé de millones de formas que todas impliquen un contacto físico estrecho. La lactancia lo que hace es que te pone muy fácil ese contacto físico, que cuando das el pecho estás constantemente...
amando a tu bebé con tu
Y este cuerpo-cuerpo constante es lo que sube la oxitocina, es lo que protege, es lo que también, en términos de proteger de la ansiedad, hace que tú entiendas a tu bebé de forma instintiva. Y esto es muy diferente del amor. Un ejemplo clarísimo que yo vi, en mi propio caso, cuando Javier era un bebé estos 25 días, podéis imaginar que yo le amaba con toda mi alma y que hubiese dado mi vida por él.
Pero como él estaba siempre siendo cuidado por Carlos, por mi marido, por su padre, Carlos le entendía mejor que yo. Osea, Carlos respondía inmediatamente a su llanto, sabía cómo calmarle y yo me sentía muy torpe en sus cuidados porque yo estaba todo el día haciendo otra cosa que no era estar físicamente con mi bebé. Entonces, lo que nos da la lactancia es esa cercanía que nos da esa habilidad de cuidar instintivamente a nuestros bebés, de entender por qué lloran, de saber lo que necesitan sin tener que pensarlo con la cabeza.
Una puede ser una madre excelente porque sabe hacer todo lo que tiene que hacer, pero le puede costar mucho, un esfuerzo muy grande intelectual, si no tiene esa cercanía constante con su bebé, que hace que fluya, que es muy fácil.
Judith Janssen (06:57)
Cuando hay falta de vínculo, a veces puede ser por alguna patología, como estamos mencionando, alguna patología de salud mental
a veces por estrés postraumático, cuando ha vivido eventos a lo mejor que para ella han sido traumáticos. La lactancia
intensiva, es una constante demanda del bebé, la madre tiene que ocuparse y también está el tema de la fatiga. Entonces, ¿cómo relacionan todos estos
el vínculo?
Carmela K Baeza (07:26)
Esta pregunta es muy compleja porque depende muchísimo de cada caso. No es lo mismo haber tenido una vida normal y luego haber tenido un trauma en el parto y enfrentar la lactancia, que lo mejor venir de una infancia traumática
de abuso sexual y llegar a esa lactancia. Puede haber muchos casos diferentes. Lo que sabemos sin ninguna duda es que una lactancia agradable y satisfactoria y un contacto
íntimo y estrecho con el bebé, siempre van a ayudar.
¿Qué pasa? Que hay mujeres que por su pasado, sea el que sea, les cuesta desear esta relación estrecha con su bebé. Hay veces que los profesionales lo hacemos mal e indicamos, por ejemplo, en una depresión postparto es muy típico que se le diga a la madre, no, tú descansa para que duermas bien y otra persona va a cuidar a tu bebé para que tú descanses. Entonces, con esa buena intención...
lo que hacemos es quitar a la madre el regalo que le da cercanía con su bebé. Entonces, la forma de cuidar a una mujer con depresión postparto es un acompañamiento con un grupo de apoyo si ella lo desea, una terapeuta perinatal, y, sobre todo, apoyar una lactancia para que sea placentera y favorecer el contacto constante entre madre y bebé. Porque también sabemos que cuando hay una depresión postparto...
La madre está afectada, pero el bebé también está afectado. Vemos que los bebés pueden tener secuelas si no hay una relación estrecha con la madre. Entonces, una madre con represión postpartum la debemos acompañar a ayudar a hacer mucho porteo, por supuesto, una lactancia disfrutada, piel con piel, hablar con su bebé... A veces incluso tenemos que hacerlo como pauta, decirle todos los días a las 10 de la mañana, coges un cuento y se lo lees a tu bebé mirándole a la cara.
Porque a veces ellas no son capaces, no tienen ganas ni fuerzas para contarle nada a su bebé y para hablar con su bebé. Entonces, a veces hay que pautarlo. Y ahí trabajamos, lo ideal es que haya una pareja o alguien cercano a la madre que nos pueda ayudar. Porque trabajar la depresión posparto sólo es muy complicado.
Alejandra Oliden (09:15)
¿Cuáles serían para las matronas en la consulta algunos signos tempranos de agotamiento materno que podamos identificar?
Carmela K Baeza (09:23)
Es muy importante las consultas de postparto, hacen la matrona o la enfermedad de pediatría, que también a veces en los centros de salud donde no hay matronas, ejemplo, es quien suele acompañar más a la madre en este momento. Lo que queremos detectar es... Lo primero importante es preguntar. No solo preguntar cómo están los puntos, cómo estás de los entuertos, sino cómo te sientes. ¿Estás triste, estás contenta?
¿Qué sientes por tu bebé? Hay que preguntarlo explícitamente. Porque si no lo buscamos, muchas madres no lo van a contar. cuando tú has tenido un bebé y todo el mundo da por hecho que tienes que estar feliz, muchas veces las madres no se atreven a decir que están tristes. Entonces sonríen, es lo que llamamos la depresión sonriente. ¿Cómo estás? Bien, bien. ¿Contenta un bebé? Sí, sí, estoy feliz. Y en el fondo está llorando por dentro. Entonces es muy importante preguntar cómo estás, cómo ha sido el parto para ti. Por ejemplo, contar la experiencia de parto.
Es muy importante para todas las mujeres. Muchas veces ahí puedes detectar que ya hay indicios de tristeza o incluso que en el embarazo ya había empezado una tristeza, muchas depresiones, casi un tercio comienzan en el embarazo. ¿Cómo ha sido el embarazo para ti? ¿Cómo te has sentido durante el embarazo? Es una pregunta muy sencilla y muy importante. ¿Cómo te sientes ahora? Y ahí podemos ir detectando. Las madres nos van, habitualmente si hacemos preguntas abiertas y tenemos un poquito de paciencia, nos van a contar porque han venido para que las acompañemos en su puerperio.
Y también una madre que no tiene deseo de salir a la calle, de mostrar a su bebé a sus amigas, que no quiere recibir visitas, son signos más evidentes. Y luego es importante el tema del sueño. Hay como una relación circular entre depresión y sueño, de forma que la depresión altera el sueño, el sueño alterado empeora la depresión y se forma ahí un ciclo que a veces es también difícil de romper. Entonces, un signo objetivo muy fácil de preguntar es el tiempo que la madre tarda en conciliar el sueño.
Sabemos que si tarda más de 20, 25 minutos en conciliar el sueño, esto es un signo de depresión Entonces, una madre que está mamantando, la lactancia cuando va bien, induce el sueño. Si una madre se levanta, medio levanta de la cama o se incorpora, pone la bebé al pecho, ve que está mamando y se vuelve a quedar dormida. Las hormonas de la lactancia le ayudan a descansar. Pero si la madre está con depresión postparto o si la lactancia está siendo dura o si la madre está con fórmula y biberón, entonces esa madre
nos va a contar que tardo mucho tiempo en quedarme dormida y veo el reloj y veo que pasan los minutos en el reloj.
este es un signo que también es importante de reconocer.
Alejandra Oliden (11:31)
a menudo se recomienda interrumpir la lactancia nocturna para mejorar el descanso,
el descanso materno, cómo revertir, cómo acompañar para que la lactancia sea un apoyo y no una carga.
Carmela K Baeza (11:42)
Pues mira, esto es un error muy grande. sea, toda la evidencia y cada vez van saliendo más estudios. De hecho, hace un mes tuvimos en Madrid unas jornadas, en Madrid y Barcelona, con Kathleen Kendall-Tackett, es una psicóloga que trabaja muchísimo este tema, el tema del trauma, la depresión postparto, el sueño en relación con la lactancia y la maternidad. Y es que está clarísimo, una madre que mamanta en una lactancia normal duerme mucho mejor y duerme más tiempo que cuando hay una lactancia artificial.
Esto nos cuesta creerlo porque el mito es no darle un biberón bien grande para que se quede dormido ocho horas y te deje descansar. Pero nuestros bebés no duermen más cuando toman biberones. Y aunque duerman los bebés un poquito más, la madre no duerme mejor cuando está dando lactancia artificial. Esto nos cuesta metérnoslo en la cabeza.
Alejandra Oliden (12:24)
Entonces, así estrategias para apoyarlas sin que se comprometa la lactancia cuando... Bueno, supongo que información, Y estar explicándoles, contextualizar la lactancia nocturna para ellos.
Carmela K Baeza (12:35)
Eso es, eso es, importante. Y ahí nos juegan muy malas las expectativas, Que todos... bueno, esperamos que el bebé haga tomas frecuentes durante el día y luego ya por la noche, pues, ¿no? La típica pregunta es ¿y cuándo va a dormir toda la noche? Pero un bebé no duerme toda la noche hasta el año, dos años. Entonces tenemos que irnos educando en que esto es lo normal. Que un bebé por la noche en los primeros meses hace dos, tres, cuatro tomas. Pero que si estamos en colecho, el bebé está muy pegadito...
Alejandra Oliden (12:49)
mmm
Carmela K Baeza (13:00)
no hay dolor en la lactancia, es que la madre prácticamente no se despierta. Muchas madres cuando les preguntan en estudios de sueño cuántas tomas han hecho por la noche, dicen pues una o dos, y han hecho cinco. Pero no se dan cuenta, esto es parte del beneficio de esa lactancia. Entonces, ¿qué dificulta el descanso? Pues por ejemplo que el bebé duerma en otra habitación. Entonces tengo que despertar, le oigo llorar, me despierto, tengo que ir a la habitación, coger al bebé, calmarlo porque está llorando,
ponerla al pecho, darle al pecho en la silla y que me quedo dormida, volverla a volver a mi habitación. Sin embargo, si el bebé está o en la cama con la madre o en la cuna muy pegado a la cama, es que apenas me despierto, lo pongo a mi lado, le doy el pecho y se vuelve a dormir enseguida. Estas son estrategias importantes. Y luego, también una cosa que es muy agotadora es cuando las madres piensan en la hora de dormir. A las 8 ya es la hora de que el bebé se duerma.
Ya comienza la noche. No, Para el bebé no es así. Al bebé le da igual. Hasta los tres meses no es capaz de distinguir día y noche. El bebé tiene su ritmo y cada dos horas, tres horas va pedir una toma. Entonces también quitar esta expectativa de a las ocho es la hora de acostarle. O sea, bueno, le puedes acostar, pero a las diez y media te va pedir otra vez.
Judith Janssen (14:00)
Gestionar expectativas es súper importante en muchos áreas. bueno, hemos estado hablando ahora de la salud mental y algo que está relacionado también, a lo mejor no es una
salud mental, pero sí que para mí está bastante relacionado es el tema
las inseguridades alrededor de lactancia materna
Muchas madres, incluso en el embarazo ya, expresan miedo a no tener suficiente leche. Y sabemos que en realidad solo un 5 % tiene hipogalactía real, pero que el 36 % más o menos abandona la lactancia por esta percepción. Y a la vez la hipogalactía real existe y es compleja, además, porque puede tener causas maternas, tener causas neonatales, pero a menudo es bastante multifactorial, ¿verdad?
Carmela K Baeza (14:24)
No,
Judith Janssen (14:45)
¿Cómo podemos entender mejor esa complejidad.
Carmela K Baeza (14:48)
Yo creo que lo primero es distinguir los dos conceptos que tú has señalado. Una es, hipogalactía significa insuficiente cantidad de leche. Una cosa es la hipogalactía percibida y otra cosa es la hipogalactía real. Hay muchas madres que tienen la percepción de que no tienen suficiente leche cuando de hecho sí tienen suficiente leche. Y esto es la mayoría. Luego están las hipogaláctías reales en las que realmente no hay suficiente volumen de leche. Las hipogaláctías percibidas...
Es muy importante el trabajo de educación maternal durante el embarazo y sería buenísimo hablar en los colegios cuando se dan las clases de biología, hablar también de la lactancia, que es un hecho biológico igual que todos los demás y que es importantísimo. Si desde pequeñas y pequeños todos entendiésemos cómo es el mecanismo normal de la lactancia, llegaríamos con expectativas adecuadas. Entonces, ¿en qué cosas tenemos que ofrecer educación? Primero,
en lo que es un comportamiento normal del bebé. Es decir, que las madres antes de tener a sus bebés entiendan que es totalmente normal que su bebé pida cada hora y media, dos horas, dos horas y media, a veces tres si hay suerte, que haga estas tomas nocturnas frecuentes, ¿verdad? Explicarles que por las tardes los bebés suelen estar más irritables y pedir con más frecuencia que por las mañanas. ¿Por qué? Porque si no, cuando llega ese momento, si no tienes ninguna información ni tienes experiencia y tu bebé te pide cada dos horas y media, dices, pues es que no tengo suficiente leche.
Pero no es verdad, el bebé se está comportando como bebé normal y no es un problema de tu cantidad de leche. O cuando llegaste este momento de lo que llaman, a veces le llaman la hora bruja, que por la tarde el bebé pide y pide y pide, lo que llamamos tomas en racimo, hace tomas muy seguidas por la tarde, pues muchas veces las madres dicen es que aquí no tengo leche por las tardes, le voy a dar un biberón. Cuando es un comportamiento normal en el que el bebé lo que hace es acopio de calorías para intentar empezar a hacer una primera pausa nocturna un poquito más larga, a lo mejor de tres o cuatro horas en ese primer tramo de la noche.
Y luego también, por un lado, esa educación en lo que decías tú, Judith, en las expectativas, que hace un bebé normal, en una lactancia normal. Y lo segundo
es importante dar a las familias, a las
información sobre cómo saber que su bebé está comiendo suficiente. Porque esto es una cosa que también da un poco de ansiedad.
Es muy fácil saber cuánto ha tomado viendo, por ejemplo, los primeras 15 días, cuánto ha salido. Hay unas tablas muy sencillas que les damos en la consulta de los padres para que estén en la nevera o en el móvil de las cantidades de pises y caquitas que tiene que hacer un bebé que está comiendo bien. Eso lo damos en la educación maternal antes de que nazca el bebé y les decimos, si está haciendo este número de pises el tercer día, estas caquitas son de este color y esta consistencia, todo va bien.
Y si no está haciendo esto, me llamas y lo vemos. Eso también les da mucha tranquilidad. Y también enseñarles a distinguir cuando su bebé en el pecho está tragando, está comiendo. Porque no siempre que un bebé está en el pecho moviendo la boquita, está comiendo. Entonces, si ellos lo saben identificar, pueden decir, mira, está comiendo fenomenal, o mira, en esta toma desde el principio está haciendo así y no ha comido
Porque queremos darles herramientas para que, en caso de que vean algo que...
no les está tranquilo, no se puedan consultar sin que estén angustiados muchos días o sin que haya un problema que quede sin identificar.
Judith Janssen (17:42)
Y en los casos confirmados de hipogalactia, que es la minoría pero sí que existen, ¿han surgido nuevas estrategias o enfoques que las matronas deberíamos conocer?
Carmela K Baeza (17:53)
Pues mira, en el caso de las hipogalácteas reales, también es importante entender que hay dos tipos de hipogalácteas reales. Una es la hipogaláctea real secundaria, que es porque se ha hecho un manejo inadecuado. Es decir, que luego haciendo un manejo adecuado se puede revertir. Por ejemplo, pues un bebé que ha nacido por cesárea, un poco comprometido, se ha ido a neonatos, estado ahí tres días, la madre nadie le acompaña en una extracción de leche y cuando se vuelven a reencontrar, la madre tiene...
un poquito volumen, bebé está con biderones, hay una lactancia mista, esa madre no tiene suficiente producción para su bebé, pero no porque no sea capaz de tenerla, sino porque el manejo sea inadecuado. Entonces, con un trabajo de poner al bebé, hacer una buena lactancia, hacer extracciones, lactador, todo lo que haga falta en cada caso, podemos ayudar a que esa producción remonte y esa hipogalactia pueda desaparecer.
No hay ninguna estrategia nueva, lo que hacemos es estimular más de la forma en la que a esa madre y ese bebe, les sea aceptable y que funcione, intentar llegar al máximo de producción que sea posible. Y luego están las hipogalácteas primarias, son aquellas en las que, por la razón que sea, el tejido glandular, el pecho, la mama de esa mujer, no es capaz de producir toda la leche que ese bebe necesita. Eso puede ser una hipoplasia mamaria, o sea que no hay suficiente tejido dentro de la mama,
puede ser que haya una cirugía en la que se ha quitado tejido glandular y no haya suficiente, un problema hormonal importante, etc. Y como decías tú, es a lo mejor entre un 5 y un 8 % de la población de mujeres, que son poquitas, pero ahí están. Y ahí realmente, tristemente no hay nada nuevo. Lo que hacemos es estimular lo más posible. En algunos casos utilizar galactógagos puede ayudar, pero realmente, por ejemplo, en el caso de que haya una hipoplasia,
que no hay suficiente tejido glandular, pero la prolactina está bien, pues dar galáctogagos tampoco tiene mucho sentido porque no es un problema hormonal, es un problema de tejido, aunque a veces lo probamos para por si acaso. Pero realmente no hay muchas cosas nuevas. Lo que nos faltan es estudios para conocer la etiología, saber por qué se produce, cuáles son los mecanismos para intentar revertir ahí. Por ejemplo, en caso de haya un problema hormonal, se está trabajando con metformina en el embarazo.
Pero todavía no hay resultados. En algunos casos, se ha probado a dar prolactina sintética, pero es muy cara, la fabrica muy pocos laboratorios y se usa básicamente solo para estudios, no está a nivel comercial, no se puede comprar. Entonces nos pasa como siempre que realmente el que una adaptancia funcione no beneficia a nadie de los que quieren vendernos cosas. Entonces no se dedica dinero a la investigación, es complicado.
Alejandra Oliden (20:22)
Claro, me imagino que es necesaria una evaluación completa, adecuada, para que no se introduzca la suplementación como una intervención innecesaria que compromete de alguna manera la salud del bebé.
Carmela K Baeza (20:35)
Eso
que hacer, como en cualquier consulta de enfermería y medicina, hacer una buena historia clínica,
como ha sido su infancia, ha habido alguna por ejemplo...
Hace poquito tuve una hipogalactia en una
por mucho que la estimulaba no aumentaba la producción, vino a la consulta y haciendo una buena historia esta mujer de pequeña había tenido un tumor cerebral, la habían radiado y tenía un problema
Entonces se puede hacer nada porque no había nada que hacer pero por lo menos ya entiendes y te da la tranquilidad de decir que aquí no hay más remedio que hacer una lactancia mixta porque no va a haber más producción de leche por esta dificultad.
Esto sí, siempre es imprescindible
una buena historia clínica, una buena anamnesis también, valorar física, una buena exploración física y por supuesto ver una toma, porque muchas hipogaláctias no son cuestión de la madre sino que tienen una dificultad en la succión del bebé. Si el bebé no succiona bien, el pecho no está bien estimulado, que es lo bonito de la medicina de la lactancia, que tienes tres pacientes, la madre, el bebé y la relación entre ellos.
Alejandra Oliden (21:26)
Uh-huh.
Totalmente. También nos gustaría hablar un poco sobre mastitis. En el 2022 hubo un cambio en las recomendaciones para el manejo de la mastitis. Nos podrías resumir las actualizaciones.
Carmela K Baeza (21:39)
jajaja
Sí, bueno realmente me imagino que sabéis que ha habido mucha revolución con este protocolo nuevo que propuso la Academy of Breastfeeding Medicine, la ABM, porque realmente el protocolo, muchas de proposiciones que ellas hacen no están basadas en ninguna evidencia. Por ejemplo, ellas lo que dicen es que ante una mastitis aguda, mejor no hacer nada. Es decir, seguir la lactancia...
normalmente, no dar preferencia a ese pecho como hemos hecho siempre, no hacer nada, si acaso poner un poquito de hielo. Creo que dicen también, cuando es de repetición, tomar lecitina de soja o tomar probioticos. Entonces, para ninguna de estas intervenciones que ellos proponen, hay evidencia. Por eso ha habido un poquito de revuelo. Porque si desde siempre la mastitis, el manejo que hemos hecho y que yo creo que todas podemos atestiguar, que funciona.
Dar un poco de preferencia al pecho, poner primero al bebé en el pecho afecto durante unos días hasta que el mastitis mejora y básicamente ya está. No sé vuestra experiencia, pero mi experiencia casi todas las mastitis se curan
Entonces, si ellas proponen este nuevo cambio que es lo que ellas dicen hacer lactancia fisiológica, que tampoco explica muy bien lo que es. Bueno, seguir lactando igual básicamente. Entonces, si tú vas a proponer un cambio en un tratamiento tan establecido como es este, tienes que
decir en qué te basas para hacer esta recomendación. Tienes que decir, hemos hecho esta recomendación con 2.000 mujeres y funciona mucho mejor. Fenomenal. Entonces, mí personalmente y a la gente con la que trabajo así más cercano, el protocolo no nos ha aportado mucho, más que confusión. Pero a nivel práctico, el manejo de la mastitis aguda realmente... Yo creo que no ha cambiado.
El protocolo habitual de la mastitis es primero dar preferencia al pecho afectado, dar antiflamatorios, medidas de confort, por ejemplo poner un poquito de frío. Eso siempre ha estado... Yo creo que empieza a más conciencia entre los médicos de no poner antibiótico a la primera, que eso es muy importante.
Judith Janssen (23:25)
Sí, yo también he visto este cambio, pero bueno, es verdad que también esos cambios van lentos porque eso ya también es algo que ya se sabía hace bastante tiempo y también, bueno...
Carmela K Baeza (23:33)
Exactamente.
respecto al protocolo, parte de la dificultad ha sido que el protocolo está escrito por autoras norteamericanas y allí se utiliza muchísimo el extractor porque tienen bajas maternales de seis semanas. Todas las madres enseguida están con extractor. Realmente, si tienes una mastitis aguda y no estás lactando a tu bebé porque estás en el trabajo y te...
sacas muchísima leche del pecho afecto, puedes caer en un exceso de producción en ese pecho y tener problemas por eso. Yo creo que su recomendación viene más
se basan en la población que ellas atienden, que es totalmente distinta a la que se atienden en otros países del mundo, en el que es suficiente con dar un poquito de preferencia y nadie se va a poner a sacarse leche como una loca del pecho con la mastitis. Eso realmente no lo recomendamos y es verdad que puede dar problemas. Creo que también parte del problema ha ese, que no han tenido en cuenta
más que a su propia población, que es muy diferente.
Judith Janssen (24:25)
hablando de la inflamación incluso el dolor se habla también cada vez más de la disbiosis no como causa de inflamación y dolor... cómo se detecta y qué estrategias hay para para manejarlo?
Carmela K Baeza (24:38)
Pues mira, eso también es un tema muy controvertido, disbiosis implica que hay una biosis. Dysbiosis se refiere a que las bacterias, virus, de toda la población viva que hay en un cierto tejido, en este caso sería la leche y la mama, hay un estado que llama eubiótico, son las bacterias normales tiene que haber ahí, y cuando eso se altera hay una disbiosis. Lo cual científicamente tiene su lógica, tiene sentido.
¿Cuál es problema? Que en la leche materna
conocemos cuál es su estado eubiótico. ¿Por qué? Porque depende muchísimo del momento de la lactancia, de si miras las bacterias antes de la toma, después de la toma, de si la madre ha tenido cesárea, de si ha sido parto vaginal, de si está con sacaleches, de si el bebé es una niña o un niño, incluso el microbioma cambia. Y luego mi leche va a ser diferente de la tuya y de la tuya. Porque tú vives en un sitio, yo vivo en otro, yo estoy en la montaña, tú estás en la playa, tú estás en la ciudad.
Entonces, ¿cuál es el estado normal del microbioma de la leche materna? Es que no lo sabemos. Entonces, determinar que hay una disbiosis no tenemos herramientas ahora mismo para saberlo.
Alejandra Oliden (25:33)
Mm-hmm.
Carmela K Baeza (25:39)
nos pasa, por ejemplo, cuando pedimos un cultivo, sospecho que hay una infección en la mama o en la leche, pido un cultivo de
¿Qué pasa? Que los cultivos normales no me dan ninguna información útil.
Porque habitualmente lo que salen son las bacterias que vienen de la boca del bebé o que están en la piel de la madre, por ejemplo, en este foco epidermidis. Pero se ha establecido que cuando salen estas bacterias hay que dar antibiótico. Y esto no es cierto. Se está sobre tratando a muchísimas mujeres por gérmenes que son normales, que es normal que estén en la leche. ¿Qué ocurre? Aquí el problema principal, a mi juicio y a juicio de otros profesionales, de hecho...
escribimos un artículo José María Paricio, Concha de Alba, Mónica Pina y yo sobre este tema también. José María Paricio en concreto ha escrito mucho sobre el tema. La disbiosis es un diagnóstico que conviene a las casas comerciales que fabrican probióticos. Y ya está, es así de sencillo. Y me gusta decirlo así, alto y claro.
Judith Janssen (26:21)
Esto justo iba... Me encanta que lo dices porque eso era
justo mi pregunta
está viendo como un aumento muy
el uso de probióticos durante el postparto, las propias mujeres lo escuchan, lo piden, han tenido, a lo mejor, mastitis previas, mastitis en previos
entonces, hay como una especie
prescripción ahí
para mí, sin fundamento. Podrías hablar un poquito más de eso
también en relación a los cultivos. Porque es verdad que muchas veces, si no sabemos exactamente lo que está pasando ahí, se recomienda tomar un cultivo, pero tú dices que no tiene mucho sentido eso.
Carmela K Baeza (26:59)
Sí, osea, el tema de los probióticos, lo que nos dicen y de esto ha habido una revisión sistemática hace poco de todos los estudios de probióticos y realmente no está demostrado que hagan nada. Entonces, aunque la hipótesis es muy buena, de hecho cuando empezó todo este tema en el 2008, los probióticos, todos pensamos, qué bien, ¿no? Tener una herramienta que no sea un antibiótico. Entonces, lo que es la hipótesis que es si hay unas bacterias que pensamos que la leche está bien que estén estas bacterias
y la madre tiene una infección, a lo mejor darle más de estas bacterias puede ir bien. Tiene sentido, la lógica es adecuada. ¿Qué ocurre primero? Que no se ha demostrado que los probióticos que se toman para la lactancia por boca lleguen a la leche. Eso no está demostrado. Lo segundo, si cada una tenemos un microbioma diferente en la leche, ¿cómo sé yo que este probiótico que está en este bote es el que necesitas tú?
Porque a lo mejor ella lo necesita, pero a ti te va mal porque no es el que en tu equilibrio va a ir bien. Entonces, para que esto funcionase, tendría... y ahora mismo, un poco cienciaficción, es ver exactamente cuál es mi microbioma, el mío personal, ver qué me falta, si es que sé cuál es lo me falta, y darme a mí específicamente eso que yo necesito. Eso sería como el futuro, que estaría genial. Pero hoy por hoy no es lo que hacen los probióticos.
Judith Janssen (28:06)
Claro
Carmela K Baeza (28:07)
Entonces, estamos ahí, efectivamente, ahora mismo el probiótico es mucho marketing y poco más. Y es verdad que hay mujeres que dicen, yo me lo tomado y estoy fenomenal. Pero también has venido a la consulta, hemos corregido el agarre, la postura, hemos dado apoyo, hemos hecho tal, hemos hecho cual y luego también está el efecto placebo. Entonces, ¿qué te ha mejorado? Pues mira, bendito sea Dios, fenomenal, pues tómalo. Pero yo médicamente no lo voy a recomendar, yo no lo voy a recetar. ¿Que lo estás tomando y te sienta bien? Fenomenal, me alegro un montón.
Judith Janssen (28:32)
Clarísimo. Y con el tema del cultivo, ¿qué recomiendas?
Carmela K Baeza (28:35)
Pues mira, yo creo que en la consulta a lo mejor hago uno o dos cultivos al año. Yo lo que recomiendo es, la mujer en la que tú piensas que hay que hacer un cultivo, ¿qué síntomas tiene? ¿Qué estás intentando diagnosticar y qué estás intentando mejorar? Porque muchas veces, por ejemplo, el dolor tipo pinchazos, que es el dolor que típicamente es una mujer, tengo pinchazos, pues le dicen, venga, pues cultivo y antibiótico.
En España es el único país en otros no se hace. Es aquí porque el grupo que desarrolla los probióticos es español, entonces tenemos mucha tralla. Pero es que el dolor tipo pinchazos puede ser por muchísimas
Puede ser lo más habitual que es dolor referido por trauma del pezón. O un pezón que está constantemente machacado. Las mujeres tienen pinchazos. El pinchazo va del pezón, por toda la red neural del pezón y la areola, la que está tan inervado.
Esto puede dar dolor tipo pinchazo. El reflejo de eyección da dolor tipo pinchazo. El Raynaud, el vaso espasmo del pezón, da dolor tipo pinchazo. Las contracturas musculares de los músculos pectorales dan dolor tipo pinchazos y sensación de ardor. El problema es que en nuestra cabeza hemos asociado que cuando hay dolor tipo pinchazos hay que hacer un cultivo.
Y luego fijaros, no sé si vosotros pedís cultivos o no, pero muchas veces cuando nos llega un cultivo y sale una bacteria, no tenemos ni idea de lo que significa. Entonces es un cultivo y te sale rocilafinafus, mercilosus. Lo estoy inventando. ¿Y qué haces? ¿Tú cómo sabes que esa es la bacteria que le está dando pinchados a la mujer? No tienes ni idea. Osea, ni vosotras ni yo ni nadie. Por eso no los pido, porque no me dan información interesante. Entonces esta mujer se lleva un antibiótico
que nadie sabe si va a algo o pero ahí se lo pongo por si acaso. Son ciclos de dos, tres, cuatro semanas antibióticos con el problema que tiene esto para la madre, su microbioma y para el bebé. También empiezan a hacer caquitas verdes, empiezan con cólicos, que no es inocuo. Y hablamos en términos de resistencias a nivel poblacional.
Judith Janssen (30:18)
Sí, creo que causa muchos problemas justamente en esa microbiota, lo que tú dices.
Alejandra Oliden (30:22)
Bueno, entonces lo que estamos viendo es la complejidad que tiene el acompañamiento de la lactancia, y todo el conocimiento
profundo que hay que tener. Cuando una madre enfrenta dificultades, qué importante acompañar para que no se vivan las barreras como un fracaso
sino que podamos reforzar su confianza en la crianza.
Carmela K Baeza (30:44)
Yo creo que aquí también es
entre nosotras y acompañar a las madres que la lactancia no es un fin, es un medio. Es un medio para conseguir salud
es un medio para ayudar a lograr el vínculo, un apego seguro. Lo que el bebé más necesita
convertirse en un adulto sano es un apego seguro. La lactancia es una herramienta para ayudarnos a lograr ese apego seguro.
Pero no es la única, ni es imprescindible. Entonces, por todos los beneficios que tiene, por supuesto, intentamos que salgan adelante, que vayan bien, que se disfruten, pero en caso de que no sea posible una
exclusiva o una lactancia en absoluto, entonces, nuestra labor es acompañar en dar todas las herramientas posibles para cuidar y acrecentar ese vínculo para que haya un apego seguro.
Alejandra Oliden (31:23)
Y si tuvieras que recomendar herramientas o conocimientos clave para las matronas, para que nos sentamos más preparadas acompañando, ¿cuáles destacarías?
Carmela K Baeza (31:31)
Pues mira, yo creo que el papel principal de la matrona, tanto en embarazo como en el parto, como el posparto, lactancia, se resume muy facilmente y es proteger la oxitocina. Todas las cosas que aumenten la oxitocina en la madre y el bebé van a ser un bien, corto, a medio y a largo plazo.
El embarazo, el apoyo, el acompañamiento, el que las madres se conozcan entre ellas, que se puedan acompañar, escuchar, preguntarle por salud emocional, crear esos espacios.
A la hora de tener una dieta disfrutada, cuánta oxitocina nos da comer bien y disfrutar de la comida. Un apoyo social, sentir que tienes una casa en la que estás a gusto, una pareja con la que estás a gusto, o en fin, un entorno amoroso.
Luego en el parto que os voy a contar de la oxitocina en el parto, de cómo cuidarla y protegerla, ese piel con piel nada más nacer y esa lactancia que va a hacer que esos niveles de oxitocina sean robustos y constantes. Y luego, además de la lactancia, por supuesto, tenemos las estrategias de lo que es regulación y cuidado de la oxitocina. El contacto piel con piel, el masaje infantil, importantísimo. Sabéis que tenemos un montón de receptores de oxitocina en las palmas de las manos. Entonces, no solo para el bebé,
aumenta la oxitocina el masaje infantil, sino para las madres que están dando ese masaje. Todo esto se activa. Los abrazos, también tenemos montón de receptores en toda la zona de escudo, en la zona del pecho. Abrazar al bebé, ducharte con tu bebé, besarle y luego, por supuesto, lo es la interacción social, que es importantísimo también. Esto nos lo da, por ejemplo, el porteo es buenísimo porque nos da la cercanía física, el contacto de los dos pechos de madre y bebé y...
que el bebé me ve a hablar, me ve a interactuar y eso va a que el cerebro se desarrolle, toda la capacidad social con el bebé y por supuesto leerle cuentos, contarle historias. creo
mismo nuestras mayores barreras
móviles, que nos separan de nuestros bebés, que hacen que dediquemos horas y horas a estar mirando a otro sitio cuando teníamos que estar mirando a nuestros bebés.
Por supuesto, el horror de darle un móvil o una pantalla a un bebé, por favor, es lo peor que se puede hacer porque realmente es una adicción. Estamos viendo adicción ya en niños de 6-7 meses. Y luego el tema de las guarderías, los centros de cuidado infantil, intentar dentro de la posibilidad de cada familia retrasarlo lo más posible. Sabemos que el apego seguro se desarrolla en sus primeros...
sobre todo los primeros tres años de vida, el primer año, si es posible retrasar. Ahí tenemos que luchar mucho también a nivel social para que se nos permita estar con nuestros hijos. Porque sabemos que estando con nuestros hijos estos primeros años, luego van a aportar mucho más a la sociedad.
Judith Janssen (33:57)
Me encanta escuchar tu visión, esta visión preciosa
Alejandra Oliden (33:58)
Sí.
Judith Janssen (34:01)
oxitocina, la lactancia, el vínculo, que no tengo nada más que añadir a eso y obviamente hoy hemos hablado de varios temas, pero son pinceladas
haciendo mucha formación, también congresos, ¿hay algo en los próximos meses que nos puedes recomendar?
Carmela K Baeza (34:18)
Pues mira, yo creo que ahora mismo
proyecto más importante en el que estamos inmersos es el del Instituto Europeo de Salud Mental Perinatal, que tiene muchos cursos para diferentes tipos de profesionales. Hay
acompañamiento del embarazo, en la fertilidad, en el posparto, el parto, la lactancia... Yo creo que hay un poquito para elegir según cada una de vosotras de dónde os convenga un poquito de formación.
Y luego yo personalmente la verdad es que intento dedicarme a la consulta y bueno pues voy un poquito donde me llaman, pues me piden curso aquí, curso allí y no me da la vida para organizar cosas propias, por ejemplo dentro de un mes voy a un hospital en Mallorca y luego con unas matronas en Vitoria, en fin, que yo estoy disponible para dar formación donde alguien lo necesite pues ahí intentamos hacerlo lo mejor posible.
Judith Janssen (35:04)
Bueno, está muy bien saber eso, pues te llamaremos.
Carmela K Baeza (35:06)
Muchas gracias.
Alejandra Oliden (35:07)
Bueno, gracias Carmela por esta conversación tan agradable, interesante, la verdad es fascinante. Estaríamos muchísimo rato hablando,
escuchándote y a nuestros oyentes deciros que os
aguasclaras.org
que podáis seguir desde ahí todas nuestras novedades.
Judith Janssen (35:24)
Muchísimas gracias, Carmela.
Carmela K Baeza (35:24)
Muchas gracias.
Vosotras gracias por vuestra labor de divulgación que yo creo que es importantísimo que estemos desde tantos sitios trabajando todas juntas para cuidar a mamás y bebés y sus familias. Muchas gracias.
Alejandra Oliden (35:35)
Gracias.