#16 - Centros de nacimientos: Martorell
En el episodio 16, tenemos una conversación con Lluna Orus, la matrona referente actual de Martorell y Roser Palau, quien fue la matrona referente en los inicios del centro.
Hablamos sobre la evolución del centro, los factores que llevaron a su cierre, la reapertura y la importancia de la continuidad de cuidados en el proceso de atención perinatal.
Como siempre, puedes escuchar (y ver) el episodio en Spotify, Apple Podcast o Youtube.
Temas clave del episodio
- Evolución, desafíos y éxitos del centro de nacimientos Martorell.
- La reapertura del centro y el papel de la comunidad.
- La importancia de la continuidad de cuidados y la integración de servicios.
- El impacto del centro de nacimientos en la sala de partos.
- Los retos actuales y el futuro del proyecto.
Enlaces
Centro de nacimientos Martorell
Transcripción del episodio
Judith Janssen (00:18)
En el episodio 16 Alejandra y yo tenemos una combinación a cuatro con Lluna Orus y Roser Palau.
Con Roser tuvimos ya una conversación la semana pasada sobre su tesis
para hablar del centro de nacimientos se graduó en enfermería en el 2013 por la escuela superior de enfermería Hospital del Mar
y luego se formó como
la Universidad de Budapest en el 2017. Ha trabajado como matrona asistencial en el sistema de salud catalán y húngaro,
acompañando partos en casa, en centros de nacimientos y hospitalarios. Se especializa en terapias complementarias para el acompañamiento al parto
y tiene experiencia docente en formación en emergencias obstétricas, parto en agua y parto fisiológico.
Actualmente es la matrona referente del Hospital San Joan de Déu de Martorell y coordinadora del su centro de nacimientos.
proceso de cierre y reapertura de y sobre muchas más cosas
Judith Janssen (01:19)
Buenos días, Roser y Lluna. En el episodio de la semana pasada charlamos con Roser ya de su tesis sobre los centros de nacimientos, así que bienvenida, Lluna, gracias por unirte a esta conversación a cuatro. Encantada. Roser ya nos contó el otro día cómo llegó al mundo perinatal. Bueno, bienvenida Roser, que estás aquí otra vez. Cuéntanos tú, Lluna, cómo empezó tu camino.
Pues mira, yo estudié enfermería aquí en Barcelona bueno, cuando acabé no tenía muy claro hacia dónde ir, pero me acabé dirigiendo a la especialidad de matrona. Sí que es verdad que intenté presentarme al EIR, pero me salió la oportunidad, barajando varias opciones de ir a Budapest,
como alternativa, un poco más directa, a conseguir título de matrona. Pero bueno, con la idea de volver, por supuesto, hacia aquí, porque ya sabía que el mundo de la atención al parto, sobre todo aquí en Cataluña, es un poquito más avanzada. Y bueno, tenemos una mirada más fisiológica. decidí volverme después de formarme allí.
volver aquí, romper con lo que había aprendido había aprendido un tipo de asistencia más de intervención, de medicalizar el parto y entonces aquí descubrí otro mundo. Primero decidí dirigirme al mundo del parto en casa porque yo nací en para mí desde pequeña el parto era en casa. Entonces me dirigí allí,
mientras esperaba que me convalidaran el título, aprendí de un equipo que en ese momento estaba en auge, era muy conocido, siempre ha muy conocido en Barcelona, en Cataluña y en toda España, que es Titània-Tascó. Me formé con ellas, acabé quedándome un tiempo trabajando cuando me convalidaron el título y luego también decidí conocer el mundo hospitalario porque también pienso mundo en el que hay tanta intervención...
Bueno, pues que las mujeres también merecen encontrarse con otro tipo de asistencia y se merecen una asistencia más dirigida hacia el respeto al proceso fisiológico. Y entonces pues decidí compartir un poco los dos mundos, cada uno con sus pros y sus contras. Y bueno, conocí a Roser en el parto en casa, me habló de un proyecto maravilloso
que tenía y en el que estaba ella pues referente y evidentemente viendo cómo trabajaba pues confié en que donde estuviera ella, pues seguro que al menos se luchaba porque las cosas fueran a y allí estuve y bueno pues mira he acabado ahora yo de referente cogiendo un poquito el relevo de Roser un poco por casualidades de la vida pero aquí he acabado y bueno pues ahora estoy en
Marturell abrió sus puertas como primera iniciativa de centro de nacimientos público en España. Fuiste asesora desde el principio, desde los inicios, luego coordinadora desde el 2019. ¿Podrías darnos un poco de contexto sobre cómo primeros inicios, la implementación, esa primera etapa, qué agentes participaron? Pues sí, de hecho
Como expliqué en el podcast de la semana pasada, yo me formé como matrona aquí en España, en la Mutua Terrassa, y después de haberme formado, de haber estado un año allí, me fui a Inglaterra movida por esa curiosidad de cómo funcionaba un sistema sanitario distinto. Y mientras estaba allí, que ya llevaba tiempo trabajando en centros de nacimientos, me contactaron la que era coordinadora en ese momento, que era Montse Valle,
en Martorell, la coordinadora de las matronas, explicándome que estaban barajando la posibilidad de empezar con este modelo de atención. Y poder asesorar, poder ir a informar de qué era este modelo, cómo funcionaba de entender a alguien que estuviese trabajando ya en ese modelo, cómo poderlo implementar. Entonces ahí fue como cuando empezó todo. Yo estaba viviendo en Londres en ese momento.
y fui haciendo algún viaje, donde había sesiones compartidas con obstetricia, con pediatría, con matronas para explicarles qué era ese modelo, por qué era distinto, qué características tenía, simplemente como más a nivel informativo. Pasando los meses, Montse me volvió a contactar diciéndome, oye, que se han alineado las distintas piezas, ese engranaje que hablábamos antes, a nivel de gerencia,
el que era el cap de servicio Ramón Ross también de obstetricia, más del equipo de matronas para materializar este proyecto y empezarlo. Pues me pidió, oye, puedes volverte para aquí y ayudarnos a llevar a cabo este proyecto y bueno para mí fue un, ostras, no puedo decir que no a esto. Es empezar a cambiar, osea, el motivo por el que yo me he ido
conocer todo esto, ahora va empezar en España. Y es el punto de inflexión de vamos a cambiar cómo acompañamos a las mujeres. Fue como venga, vamos a ello. Cogí la maleta y me volví para empezar el proyecto básicamente.
luego cerró ¿no? En el 2022. ¿Tú puedes contarnos qué ocurrió? ¿Cómo se llegó a ese escenario de cierre? Pues yo creo
el proyecto fue moviéndose, todos los proyectos van cambiando, se van adaptando y al final era un modelo de atención totalmente nuevo en nuestro sistema sanitario. Como éramos también las primeras, íbamos bastante a ensayo y error, en el sentido de, vale, teníamos un plan funcional, qué es lo que iba a ser.
Nos basamos mucho porque en ese momento tampoco teníamos, por ejemplo, la guía de la MUNet de los centros de nacimiento, nos basamos mucho en las guías inglesas, al final era un contexto totalmente distinto, en un centro mucho más intervencionista, con matronas que no tenían esa formación, que no habían visto nunca el parto fisiológico, entonces fue como, wow, vamos a empezar a hacer un cambio y ya no solo con el equipo de matronas, sino que...
que es todo el ecosistema que está alrededor de la los obstetras, de cómo acompañan, de cómo se informa, de los equipos de enfermería, de los camilleros, de las TCAs, de todo el personal que al final está alrededor de la mujer. El proyecto fue adaptándose a cómo modelamos esto a nuestro sistema sanitario y también cómo lo modelamos
es comarcal. Que si hay mujeres también tienen complicaciones, tanto madre como bebé tienen que ser trasladados a un tercer nivel. El proyecto fue cambiando tuvo distintas fases, distinto personal que trabajaba, que se iba formando, se iba adaptando, personas que han contribuido mucho al proyecto, que han estado ahí empujando, que después se han ido.
gente nueva que ha vuelto a entrar para seguir empujando. Al final es como mucha energía poder mover tanto en el sistema sanitario en el que tenemos, porque el cambio era brutal, era abismal lo que estábamos proponiendo con lo que se estaba haciendo en ese momento en ese hospital que estaba bastante desactualizado. Pues eso, fue cambiando durante los años. Hubo un momento que empecé yo con la coordinación.
El proyecto fue modelándose. Todas esas piezas que se engranaban al principio, que eran la gerencia, las direcciones y las los dos equipos principales, de obstetricia, de matronas y después de pediatría, llegó un momento que cambiaron. Entonces, para mí, si una de esas después el resto cuesta mucho que vuelva a empezar ese engranaje.
Y llegó un momento en el que yo creo que se juntaron que las matronas más senior con más experiencia, casualidades pues en ese momento no estaban operativas más que yo para poder terminar la tesis me tuve que ir entonces el liderazgo también que cambió la dirección, cambió la gerencia y fue como un empezar de todas esas bases, esos principios que se habían sentado de
atendemos con la mujer en el centro, de tenemos protocolos pero los adaptamos a cada mujer. Todos los casos se siguen, cualquier cosa que cambie lo que estaba planeado, revisamos esos casos, vemos que podemos mejorar. Todos esos procesos se empezaron a desvanecer. Yo creo que también para un equipo de matronas, que al final son las expertas las que lideran este proyecto,
que todo esto con lo que trabajas, con la evidencia, con revisando casos, con ver cómo mejoramos, que de repente desaparezca y pasos atrás de no, hacemos esto porque lo hemos dicho y así y ya está y nos pasamos la evidencia por el forro, pues se empezó a desvanecer y esto hizo final el proceso, o sea, se rompiese, que las matronas perdiesen la confianza con el proyecto,
que la gerencia no estuviese entendiendo qué estaba pasando, porque tampoco tenía el background de dónde veníamos, de que las direcciones cambiasen, de que no había una líder clara dentro del equipo de matronas, porque el rol justo había cambiado y no estaba. Yo creo que se juntó ahí todo y todo lo que se había alineado en el principio para que se abriese el proyecto, hizo que se tuviese que cerrar.
Y también que las matronas dijesen, a ver, no vamos a trabajar y no vamos a poner en juego por un lado la seguridad de las mujeres, de los bebés, de sus familias y por otro todo esto con lo que hemos trabajado y que son las bases de un centro de nacimientos. Por eso yo creo que ahí fue donde se
Es importante lo que cuentas del equipo
esta manera no lo queremos hacer y poner ahí también los límites debería ser el centro. Y Lluna, tú formaste parte luego de la reapertura. ¿Qué cambios integrastéis para poder reabrir?
Yo ya formaba parte del equipo como trabajadora cuando cerraron yo estaba justo de baja por embarazo. Yo lo viví desde fuera.
Creo que la respuesta de las matronas fue muy buena, que creo que es lo que se debería
muchas otras situaciones. Dar un golpe sobre la mesa y
cosas por las que no vamos a Y creo que una cosa de la que se aprendió. Por el hospital se dio cuenta de lo que suponía este proyecto, la respuesta de las mujeres porque...
es cierto que muchísimas de las mujeres que dieron a luz con nosotras. Se unieron, hicieron un grupo.
una periodista entre ellas que se encargó de difundir nuestras necesidades y de poner como voz a lo que estaba pasando. Nos dieron su apoyo, enviaron cartas al hospital para que supieran lo importante que era este proyecto y que no se tenía que cerrar, que tenían que luchar por él.
Y creo que todo esto fue como un aprendizaje para nuestro hospital de, quizás las cosas sí que hay que hacerlas de otra manera. Quizás el reclamo es real, no es un grupo de matronas locas que vienen aquí a decirnos que las cosas se hacen distinto, sino que hay unos resultados, que hay una evidencia detrás que demuestra que el proyecto tenía que volver a salir a la luz. Lo que pasa es que costó mucho encontrar a alguien
que pudiera o quisiera ponerse delante del equipo, un equipo que estaba muy dañado. Yo volví de la baja de maternidad y me encontré con un equipo que eran seis matronas. Estaban incorporándose gente, pero gente que venía de fuera, que no conocía el proyecto, venían un poco a salvar sala de partos, que hubieran matronas, básicamente, porque ha habido momentos en que...
no han habido casi matronas prácticamente para cubrir todas las guardias del año. Fue una situación bastante complicada. Entonces, cuando yo volví era un equipo pequeño,
nuevas incorporaciones que no conocían que había formar. Había que recuperar el equipo totalmente. Fue una decisión bastante complicada para mí coger el proyecto porque yo estaba en una reciente maternidad. Mi bebé...
hacía un año cuando yo cogí el puesto. Fue un poco también por condiciones, voy a hablar sinceramente, de horario y de condiciones vitales que me iban a favorecer porque yo hacía guardias de noche. Pues todo tenía como un qué. Y saber que había un proyecto detrás que a mí me había hecho llegar a Martorell y que me hacía elegir como único sitio en el que realmente me gustaría trabajar a día de hoy. Aquí en Cataluña quiero decir.
Sé que hay hospitales muy buenos, pero tener un proyecto como centro de nacimiento es muy único, es una suerte. Osea, poder asistir como se asiste
dentro del sistema público es una suerte. Entonces, valoré que merecía una oportunidad, que yo había disfrutado mucho este proyecto, que sabía los buenos resultados, porque habíamos pasado una tasa de un 24 de a menos de un 15%. Aún teníamos un 12
Creo que entre 12 y 14, no llegamos al 14 el año que se Habíamos bajado la tasa de a unos resultados de partos de partos naturales, de partos en agua. Teníamos unos resultados que demostraban que había que luchar por ello. Experiencias de las mujeres también muy positivas. Osea, es era todo.
Y también lo que promovió es que tanto los servicios de ginecología, pediatría, y otros servicios del hospital que trabajan en este proyecto, porque al final todos son importantes para que el proyecto funcione, por eso estamos también ahí. Quiero decir, al final sabemos que hay situaciones en que hacen falta otras manos que no son las de una matrona y que hacen que el proyecto funcione también bien. Y se dieron cuenta de que había que cambiar
y trabajar en equipo, que esto ya hacía tiempo que se había hecho, pero bueno, es lo que hablábamos, hay cosas que desequilibran un poco y si no estamos todos muy pendientes de compensar este desequilibrio, de saber que es un tiempo de transición, que hay que ponerle esfuerzo, ganas y estar ahí, pues bueno. Hizo que todos trabajáramos en tener los protocolos en conjunto, de unirnos más también se cambió de personal, osea, había gente
que no debía estar en el proyecto y se tomaron decisiones que creo que a veces también es importante. Entonces, bueno, pues creo que eso fue un poco la vuelta. Ha sido un poco la vuelta, ¿no? El formar profesionales nuevos que teníamos, hacer cursos internos, formaciones internas y pedir formaciones externas que hacían falta, recuperar un equipo de matronas
ha costado porque ya sabéis que hay mucha falta de matronas en general también de matronas que confían en el sistema. Creo que eso es una situación muy real, que la gente ya no confía en que les van a dar unas buenas condiciones. Eso que hace que la gente decida pues otras áreas, como la atención ambulatoria.
Que no es ninguna mala opción, que hacen falta también matronas en los centros ambulatorios, desde luego, pero que hay unas condiciones mejores saben que no van a pasar por ciertas cosas que a veces pues ... Y así resumiendo, ¿qué aprendizajes sacaste de la experiencia del cierre y la reapertura?
Creo que lo hemos aprendido es, uno, que el proyecto es muy importante porque a la que hemos reabierto han vuelto venir más mujeres, muchísimas mujeres que ya habían parido con nosotras están súper agradecidas de que estemos otra vez en nos han dado su confianza
plena, sin poner en duda porque es un equipo nuevo, son pero están poniendo su confianza de nuevo en Sabemos que es muy importante luchar por él, que se trabaja muy a gusto, que cuando las trabajadoras tienen buenas un equipo muy unido y eso también da mucha seguridad que es importante que todos estemos a una.
Y que haya mucha comunicación entre
si no es donde siempre se dejan como un huequito para poder entrar y destruirlo. Sí, bastante fundamental el equipo, la comunicación, la unión en este escenario matronil en el que hay muchos frentes abiertos también, muchos sentires.
¿Cómo funcionáis actualmente como equipo? ¿Cuántas matronas sois? ¿Es un equipo independiente del paritorio o es el mismo? Sí, nuestro hospital es un hospital comarcal. Tenemos el personal que tenemos, entonces no nos podemos permitir tampoco tener dos equipos, uno para cada cosa.
Además, también nuestro centro de nacimiento está como dentro del hospital, de lo que es la estructura del hospital. Están en plantas diferenciadas, pero está dentro. Entonces, la suerte también que tenemos, que para mí es una gran suerte y siempre lo he dicho, es que ser el mismo equipo permite una continuidad de cuidados. En el momento en una mujer entra al centro de nacimientos, pero por cualquier cosa cambia el circuito, por lo que sea, puede seguir acompañada de esta matrona con la que ha creado un vínculo.
Sabes con quién estás, estás segura. Sabes cómo te ha tratado y sabes que te vas a ir tratando bien porque ha sido así. Esto lo comentábamos la semana pasada justo en el podcast, Lluna, de los resultados de la investigación también nos dicen eso, que las mujeres, que hace que mantengan esa agencia durante todo el proceso, como a nivel transversal, también es esa continuidad.
Que el hecho de que sea un equipo hace que esta mujer se siga sintiendo acompañada cuando se va a la sala de partos y eso permite que la otra pues si necesita ir al centro de nacimientos, pueda ir porque
se queda descubierto. Y todo este osmosis de vamos a trasladar este tipo de cuidados a la sala de partos también. Y que tampoco condiciona la hora de tomar decisiones a la mujer porque si de verdad necesita algo, de verdad hay que hacer intervenir,
sabe que está con el mismo equipo, no le condiciona el, ah, es que ahora cambiaré, cambiaré a otra área con otras personas. para la matrona también. Porque yo cuando estoy acompañando a
acompañando a esa mujer.
Hay muchas veces que nos hemos quedado después de una guardia que se ha acabado tu turno pero te quedas a que nazca el bebé porque formas parte de la experiencia, te han compartido contigo, es importante también. Entonces nosotras somos el mismo equipo, somos como unas 25 matronas a día de hoy. Sí que es cierto que no son todas al cien por cien porque hoy en día por la falta de matronas pues las matronas tienen
trabajos en diferentes sitios, trabajan
hospitales
con hospital. Entonces no podemos tener un equipo al 100 % fijo siempre, que es lo que yo creo que falta un poquitín todavía, ¿no? Tener como un equipo que trabaje siempre junto,
para que los ginecólogos nos conozcan a todas, para que pediatría nos conozca, pues para conocernos porque una matrona que viene una vez por semana un día, no se conoce con todos, algún día coinciden y oye no sé cómo trabajas o no tengo tanta confianza porque no sé quién
¿Y en un turno cuántas llegan a estar? Pues mira, una cosa que hemos ampliado ahora con la reapertura y un condicionante que pusimos es que hubiera una matrona más de día. Entonces
semana tenemos tres matronas de día y dos de noche los fines de semana dos y dos. Entonces las tres de día el plus que pusimos era para que pudiera
planta, en condiciones, porque al final nosotras también nos encargamos de planta, de monitores, de las consultas.
Entonces que pudiera ser como un extra que se encargara de todo lo que es planta, monitores, consultas con la matrona porque hacemos visitas previas con la matrona para que nos conozcan, hacemos acogida a las mujeres y luego de soporte a sus otras dos compañeras que una estaría como para sala de partos y otra para centro de nacimiento y hacer de segunda matrona en los nacimientos.
Y para las que no conocemos el centro, ¿cómo es el espacio? ¿Es el mismo que en la primera etapa? Sí, o sea, el centro no ha cambiado, es la misma sala que ya teníamos, sí que hemos intentado actualizarla y renovar aquellas cosillas que se necesitará, pero la sala es la misma que conocíamos ya anteriormente y que si tenemos alguna foto para aquí para compartir
pero es la misma que ya teníamos. Es como una habitación más en la primera planta, en la planta de maternidad, y más grande, con material para atención al parto, pero no es un centro fuera de lo que es el hospital. Tiene entrada propia porque entran en urgencias y hacemos un circuito distinto al de sala de partos. Si no hace falta no pasan por sala de partos.
Mencionastéis que al ser el mismo equipo que podáis ofrecer esa continuidad de cuidados,
que me parece interesante de hecho. También sabemos por la literatura sobre los centros de nacimientos que los centros que están dentro de un hospital, tienen más dificultades para realmente establecer y o mantener esa filosofía biopsicosocial
que es muy importante para un centro de nacimientos.
¿Sentís que en Martorell habéis conseguido establecer esta filosofía? ¿Tenéis protocolos separados del hospital, tenéis margen para desarrollar vuestras guías? ¿Cómo lo veis?
que yo he tomado el puesto de referente, justo también cambiaron la dirección del servicio de ginecología.
Entonces hemos trabajado mucho este año conjuntamente en actualizar y generar protocolos que no estuvieran
poder tener al máximo, porque al final lo bueno también de tener el mismo equipo, es que, tanto en centro de nacimientos como en sala de partos, podemos tener los mismos protocolos de cuidado. Simplemente algunas patologías específicas que requieran cuidados de sala de partos específicos, pues tienen esos protocolos, pero el tipo de asistencia tiene que ser el mismo.
Al final toda mujer se merece el mismo tipo de cuidados y las mismas opciones. Sí que es verdad que hay algunas condiciones que necesitan atención en sala de partos porque necesitan monitoraje continuo, básicamente o principalmente por este motivo. Y ya está, pero sí que hemos trabajado en eso, en actualizar conjuntamente o, es decir, parte de alguna persona del servicio de matronas y alguna persona del servicio de ginecología, trabajar conjuntamente para generar protocolos. Y la verdad es que al final...
se discute mucho, se llega a muchos pactos porque evidentemente somos a veces puntos muy opuestos, pero creo que es bueno porque al final como que nos da una visión a las dos partes de qué necesita y nos escuchamos qué necesita cada servicio para sentirse tranquilo trabajando en ciertas condiciones y llegar a un punto intermedio en que todos estemos contentos, que todo el mundo se sienta que participe. Algunas veces se quedan más contentos unos que otros porque hay veces que la evidencia
te acompaña o no te acompaña y de momento, sobre todo porque falta mucho estudio todavía, falta mucha gente que se lance en este campo a
lo importante es que estamos trabajando conjuntamente en ello. Es cierto que específicamente el centro de nacimiento tiene algunos protocolos, hay uno especial que es
atención al parto en el centro de nacimientos que incluye muchos de los cuidados que hemos adaptado para esta área, pero todo lo demás lo hemos hecho entre todos. Así que yo creo que más o menos estamos en camino. Yo creo que hasta que no tengamos un equipo muy consolidado, es difícil que estos protocolos se cumplan al 100 %, porque siempre si viene gente nueva viene con sus
integrados.
Y siempre quiere imponer porque es lo que le da seguridad. Hasta que le demuestras o hasta que ve que hay otras cosas que funcionan. Y yo creo que eso requiere tiempo. Para ir como al principio de cuando se empezó a implementar todo esto, uno de los principios también centrales de los centros de nacimiento es que están basados en evidencia.
Al empezar a redactar todas las nuevas guías, protocolos para el centro de nacimientos, eso empujó a que lo que se estaba haciendo en la sala de partos se tuviese que actualizar, porque si no, teníamos un protocolo en el centro de nacimientos basado en la evidencia, mucho más actualizado, que el de sala de partos. Y si una mujer era trasladada, de repente se encontraba con un protocolo totalmente distinto. Entonces, yo creo que eso también fue lo que, lo que hizo
que este tipo de cuidado se moviese a la sala de partos porque al final lo que ofreces a unas no se lo puede sacar a las otras. Entonces esas mujeres que por lo que sea tienen que ir a la sala de partos también merecen esa atención. Hizo que todo, osea, como una cadena, una cascada que hizo que todo lo que se estaba haciendo en sala de partos se actualizase.
A nivel de ya no solo la sala de partos en sí, sino de las visitas prenatales, de cuándo se hacen los monitores, de cuándo se ofrecen las inducciones. No puede ser que se ofrecen inducciones a las mujeres a las 40 semanas en la sala de partos y a las 42 en el centro de nacimientos. Es como, a ver, algo ahí no casa. Sí, y es más, que incluso ha hecho que generáramos para la sala de partos protocolos también muy actualizados, como por ejemplo este año hemos sacado el de la cesárea provínculo.
Hemos conseguido también las walking pedis, que visite pediatría los bebés en las habitaciones con un carro, y que hagan todas las pruebas en las habitaciones. Ha generado un cambio en todo. Estamos dentro del sistema, pero hemos conseguido muchísimos cambios de lo que era a lo que es y comparado con otras instituciones.
Podemos estar muy contentas de toda la evolución, que evidentemente quedará mucho camino por hacer. Eso no lo quiero desmerecer, pero que se ha conseguido muchísimo. De hecho, creo que cambios que también después se movieron a la sala de partos, pues todo lo que es el acompañamiento con el triaje telefónico, de que todas las mujeres tuviesen el teléfono de la matrona.
Tanto si van al centro de nacimientos como a la sala de partos, pueden llamar, podemos hacer el triaje de forma telefónica, podemos acompañar para que puedan venir, que el proceso de parto esté instaurado, que las matronas
las que
las altas y decidan los ingresos de todas las mujeres, tanto del centro de nacimientos como de la sala de partos. Todas estas cosas, al final parece que no, pero son pequeños elementos,
que a veces olvidamos que en muchos centros hospitalarios no está pasando. Y aquí el centro de nacimientos hizo que todo esto se implantase
la sala de partos. Si las mujeres que se habían roto la bolsa en el centro de nacimientos se iban a su casa 24 horas y volvían al cabo de 24 horas, no podía ser que a las mujeres de sala de partos eso no se lo ofreciésemos. Pues también...
se empezó a ofrecer en sala de partos. Al final hemos conseguido que todo eso y toda esa evidencia se implementen en el modelo de sala de
que dices, esto no existe en muchos paritorios, en muchos sitios hospitalarios, así que me parece muy
destacar y demostrar todo lo que se está
Bueno, chicas, ¿y si pudierais cambiar o mejorar algo en vuestro centro? ¿Qué sería?
A ver, actualmente en nuestro centro lo que pediría primero es tener un equipo consolidado, como ya he repetido varias veces, que entre todos, pues yo creo que darnos como un tiempo, dar un margen para todos estos cambios, porque estamos adaptando como en poco tiempo, queremos recuperar todo lo anterior, pero al final es un equipo que es nuevo,
y que tiene que conocerse y que tiene que ganar confianza. Entonces creo que lo principal sería dar tiempo y crear equipo. Y a la larga seguir creciendo. Pero para seguir creciendo necesitamos muchas cosas. Por empezar, una infraestructura, un equipo más grande, unas condiciones mejores porque al final...
todo lo que vamos haciendo va siempre a cargar el trabajo de la matrona también, porque al final vamos cogiendo más papel y nos vamos encargando de más cosas que nosotras encantadas, no, pero al final también hay que valorarlo. La vocación es maravillosa. Yo siempre tiro de vocación, pero es cierto que al final yo entiendo que se pida más.
Entonces, yo lo pido con ellas. Yo con mi equipo pido las mejores condiciones y siempre con ellas. Y para ello se tiene que reconocer. A la larga, que haya muchos centros de nacimientos. Si pueden ser en todos los hospitales pues sería lo
Yo me sumo a lo que dice Lluna y a lo mejor para aportar como esta visión
ahora externa y de los datos y lo que ha costado sacar a la luz la tesis doctoral
una automatización a la hora de poder recoger, de poder medir todo ese trabajo que hacen las matronas,
y todos los resultados del centro de nacimiento, sin que ello sea un esfuerzo para ellas, porque es lo que dice Lluna, pues registramos más cosas de las que registraríamos de forma habitual porque al final necesitamos medirlas. Pues si todo esto estuviese automatizado y desde el sistema, desde a nivel central del departamento de salud, ya pudiesen evaluar todo esto, también sería más fácil a la hora de decir, vale, pues al final de año sacamos datos,
y vemos cómo este modelo va mejorando y lo vamos midiendo. Y además somos capaces de hacer ese seguimiento de las mujeres no sólo en el centro hospitalario con el centro de nacimientos, sino que a largo plazo. Y las podemos seguir a ellas y a sus bebés, que eso ya sería, bueno, fenomenal. Y ver realmente el impacto que está causando el centro tanto a corto como a largo plazo.
Y como recomendación a las compañeras matronas ¿qué pueden hacer para promover estos modelos en sus zonas, sus áreas?
Pues actualizarse, formarse, conocer, conocer diferentes servicios, osea, no quedarse donde tienes confianza y lo conocido, que muchas veces suele ser pues allá donde te formas es lo que conoces, sino que abrirse el mundo,
abanico de opciones que tenemos las matronas, que al final a lo mejor el que tenías es el que te gustaba, pero como conocer,
y sobre todo acompañar a muchas mujeres y confiar en el proceso fisiológico porque es cuando más aprendes y más te das cuenta de que a veces estamos simplemente para asegurarnos de que todo está bien pero no se necesita más. Entonces yo creo que acompañar estos procesos y ver que de verdad, las mujeres en general parimos estupendamente.
Los bebés vienen a vivir y a nacer a este mundo y bueno, o sea, nuestro acompañamiento es la clave. Entonces, ver que si acompañas a una mujer en ciertas condiciones, todo fluye más y todo acaba teniendo mejores resultados. Entonces, al final, eso, vivirlo. Sí, yo me sumo también a Lluna y el hecho de tener esa curiosidad y seguir...
formándonos y aprendiendo más. Y ver aunque sea pues que puedes hacer una rotación externa o te dejan un tiempo para ir una semana y que sea ver a ver este tipo de espacio este acompañamiento de una forma distinta porque creo que entonces tu mente de wow, esto no es lo que he visto hasta ahora. Pensaba que era fisiología, no lo es, que que poder hacer eso
es importantísimo y escuchar a las mujeres, realmente estar a su lado y escucharlas y ver qué es lo que nos piden y acompañarnos de ellas porque al final a veces las matrónas creo que nos sentimos como un poco solas, y como que estamos luchando todo el como una sensación un poco rara y decir, bueno es que al final, lo que queremos es apoyar, acompañar a las mujeres y levantar su voz, entonces dejemos que nos acompañen en esa fuerza, en ese cambio
también del sistema. Palabras todas muy sabias. Muchísimas gracias de verdad por compartir vuestras experiencias, vuestra sabiduría también vuestros resultados. Muy interesante y muy necesario para ir expandiendo centros de nacimientos
Bueno, a las oyentes espero que te haya gustado este episodio, a nosotras yo creo que sí mucho. Gracias por acompañarnos y hasta pronto. Hasta pronto, gracias. Gracias a vosotras.